domingo, 2 de septiembre de 2007

23. Desayuno: cafe con vodka



Antes de partir de Sighisoara topamos esta adorable cantina, con corazones de papel y botellas de vodka en las vitrinas. Entramos por un café, nos regalan un vaso de vodka. Nuestro compañero de mesa baila cumbias rumanas y nos toma de la mano, tiene enyesado el brazo, no le duele, simplemente no quiere trabajar, prefiere tomar café con vodka a las diez de la mañana. Le pedimos a la señora que está de pie en la barra de al lado una foto, acepta después de varios minutos de timidez, se quita los anteojos de espesos lentes, despeja el profundo azul de sus ojos; con el rostro desnudo, casi ciega: se entrega.